Una piel bonita es la clave de la belleza, pero tener un cutis perfecto, no siempre es posible. Hay factores como el estrés, cansancio y la deshidratación que pasan factura en forma de manchas e imperfecciones en el rostro.
¿Quieres saber la solución para que tengas siempre una piel perfecta?
Sigue leyendo este post para descubrir cómo hacerlo.
Consejos para conseguir una piel perfecta
Aunque parezca complicado, conseguir una piel radiante, unificada e hidratada está al alcance de todos. Unos sencillos pasos en tu rutina marcarán una gran diferencia. Las distribuidoras AVON te contamos cómo conseguirlo. ¡Toma nota!
1. Se cuidadosa con tu piel.
No siempre le damos a nuestro cutis los cuidados necesarios, es más importante de lo que creemos. Elige con atención los productos adecuados para tu tipo de piel, siempre que puedas opta por soluciones naturales. Hay ingredientes de origen natural que aportan nutrientes necesarios para el rostro y son muy efectivos, por ejemplo, la miel.
2. Limpia tu piel desde el interior.
La nutrición y el aspecto de tu piel están muy relacionados y tenemos que tenerlo en cuenta. Nuestro organismo puede acumular toxinas que tienden a exteriorizarse a través de nuestra piel en forma de acné o sequedad. Comer sano nos aporta salud y belleza, ya que se crea un efecto depurativo de forma natural. Nutrir la piel empieza por dentro, por eso es tan importante hacer una elección de los alimentos que deberíamos consumir.
- Sigue una alimentación rica en origen vegetal. Frutas, verduras, frutos secos, semillas, etc.
- Reduce el consumo de proteína en origen vegetal.
- Enriquece tu dieta con ácidos grasos esenciales como el Omega 3 y 6, las semillas y los vegetales de hoja verde.
- No te pases con el alcohol, uno de los efectos de beber es la sequedad en la piel, tu gran enemigo.
3. Ten una rutina de ejercicio.
Hacer ejercicio de forma periódica ayuda a mejorar la circulación y proporciona nutrientes a las células. De esta forma, ayudas a producir colágeno, la sustancia que hidrata nuestra piel. Entrenamientos aeróbicos, con pesas, montar en bicicleta, practica el deporte que te guste más. La clave está en poner el cuerpo en movimiento, quemar calorías y eliminar toxinas. ¡Tu piel lo notará!
4. Cuerpo hidratado.
Tu cuerpo necesita mantenerse hidratado en todo momento. Bebiendo dos litros de agua estarás limpiando el cuerpo por dentro. Esta limpieza interior elimina la mayor parte de las impurezas que impiden la llegada de nutrientes a las células, incluyendo la piel. Si no te hidratas bien, empezarán a aparecer las líneas de expresión. Somos un 60-70% de agua, así que nuestro buen estado de salud, depende de la hidratación que le demos.
5. Protección ante el sol.
Es muy importante exponernos al sol durante al menos 15 minutos al día para la producción de vitamina D. Sin embargo, una sobreexposición al sol puede ser contraproducente y dañar nuestra piel, aumentando el riesgo de mancas, quemaduras y cáncer de piel. Usa siempre protección solar en todas las partes del cuerpo, no solo en la cara. Recuerda que existe una gran variedad de protectores solares adecuados para cada tipo de piel.
6. Di adiós al estrés.
El acné y las espinillas aparecen en las épocas que estamos bajo mayor presión, se producen por el estrés. Es muy importante que te tomes tu tiempo para relajarte de la forma que más te guste. Una dieta sana y equilibrada, el ejercicio físico y las técnicas de relajación, ayudan a reducir el estrés y, en consecuencia, mejorar el aspecto de nuestra piel.
La importancia de cuidar la piel
En AVON sabemos que la piel es la parte del cuerpo que nos protege de agentes externos, suele deteriorarse bastante y es importante tratarla y cuidarla. Por este motivo, al comprar AVON online , obtendrás productos de primera calidad que ayudarán al cuidado de tu piel.
El hecho de comenzar a cuidarse la piel no tiene nada que ver con la edad ni con el envejecimiento. Todos debemos cuidarnos la piel. Como hemos mencionado anteriormente, la piel es el órgano del cuerpo humano que nos protege de manera constante y continua de todos los agentes externos, frio, calor, aire y bacterias. Debido a la regeneración de la piel, genera células muertas que han de eliminarse para que no se queden expuestas en nuestra piel.
La piel es el reflejo del alma, nos avisa de cómo nos encontramos internamente. Es algo importante a destacar ya que según cómo se encuentre tu organismo, tu piel se verá de una forma u otra. Por estos motivos, consideramos que es fundamental llevar un cuidado constante.
Reglas de oro para tu piel
Para mantenerla piel del rostro sana, no basta con aplicarse crema hidratante cuando notamos que la piel está seca. Al igual que tampoco es suficiente con someterse a tratamientos faciales cuando vemos que ya no hay solución.
Te dejamos las 10 reglas de oro a seguir en nuestra rutina de cuidado para conseguir una piel sana, joven y radiante.
1. Sé constante.
De nada sirve cuidar nuestra piel únicamente cuando vemos que su aspecto no es bueno. En el cuidado de la piel la prevención es la clave y la constancia mucho más.
2. Conoce qué tipo de piel tienes.
No todas las pieles son iguales y por ello, existen tantos tipos de productos para su cuidado. Es esencial conocer nuestra piel para escoger a nuestros aliados perfectos.
3. Límpiate la cara 2 veces al día.
Limpiar la piel del rostro es esencial para que todos los otros cuidados den sus frutos. Lávate la cara dos veces al día, una por la mañana para eliminar las toxinas que se desprenden al dormir y otro por la noche, potenciando la función reparadora del sueño.
4. Escoge tu crema hidratante con ayuda de un especialista.
La crema hidratante es algo necesario para tu cara. La dermis está compuesta por un 70% de agua y la epidermis por un 15%. La hidratación es esencial, déjate aconsejar por un especialista a la hora de hacer tu elección.
5. Aplícate crema hidratante 2 veces al día.
La crema hidratante se aplica al despertarse y antes de acostarse. Es recomendable que la crema de día sea diferente a la de noche, el funcionamiento de la piel es distinto al despertar que al dormir.
6. Desmaquíllate bien.
En el momento de desmaquillarte, hazlo bien y de forma suave. Hazlo de forma correcta para que la regeneración de la piel al dormir sea efectiva.
7. Cuida el contorno de los ojos de manera especial.
La piel que rodea los ojos es especialmente fina, sensible y tiende aún más a la deshidratación. Hidrata esta zona tanto como puedas.
8. Exfolia tu piel.
Por norma general, deberíamos exfoliar la piel dos veces por semana. Sin embargo, la frecuencia cambia según el tipo de piel que tengas. Las pieles grasas necesitan más exfoliación que las secas.
9. Protégete del sol.
Aplícate crema solar y asegúrate que es el último producto que aplicas en tu rutina.
10. Tratamientos estéticos para potenciar los cuidados de tu rutina.
No es la solución, pero si un complemento efectivo para que especialistas cuiden de tu salud facial.